"El hombre que le dijo "no" a Cristina Fernández reconoce que en las legislativas en Mendoza se juega su ticket para las presidenciales de 2011" dice el diario El Mercurio de Chile sobre nuestro Vicepresidente Opositor Julio Cobos en una nota del domingo anterior.
Cita al director de la consultora Poliarquía para relativizar no solo la falta de carisma del líder de la UCR sino el hecho que siendo el Vicepresidente sea la cara visible de la campaña opositora en Mendoza, y aunque lo denominan "desertor" mencionan que la gente dice a Cleto en la calle que ellos le ayudarán a "sacar a esa yegua".
Omite decir el diario la escasa diferencia (aún con los medios mendocinos operando a favor de Cleto) que lleva Cobos en las últimas encuestas por sobre el PJ, el aliento en la nuca que le dicen.
Me parece interesante recordar los antecedentes de El Mercurio, diario que supo colaborar activamente para el derrocamiento del presidente chileno Allende y no conforme con eso apoyó abiertamente a la dictadura militar del genocida Pinochet, recomiendo por si no lo vieron el documental El diario de Agustín .
A propósito de El Mercurio, en esta nota Fernando Villagrán (codirector del documental) dice: "Creo que el diario se acomoda a las circunstancias y tal como lo hizo antes, trata de adaptarse, pero intenta seguir influyendo para que el curso de la historia y la política chilena vaya por el carril que su dueño quisiera. Que lo logre o no, ya no depende sólo de El Mercurio, pero es un poder y opera como un poder."
Respecto a la impunidad en la actualidad sobre accionar del diario durante los 70 dice: "Probablemente se lanzó un manto de silencio sobre esa historia, porque para quienes estaban en posiciones de poder resultó más cómodo entenderse con El Mercurio y establecer un cierto pacto de no agresión, y eso tiene un costo, muchos costos diría yo, y el principal es que no hay una prensa pluralista y que la prensa escrita esté desprestigiada."
"Algo que comprobamos trabajando en este documental, es cómo, por ejemplo en la clase política, cuesta encontrar alguien que esté dispuesto a que El Mercurio lo silencie. Y eso da cuenta del poder que tiene. En consecuencia, creemos que es muy bueno desnudar ese actuar, porque habla muy mal de la democracia en Chile que exista un poder fáctico que, por la vía de la auto censura, resuelve qué es tema de agenda o qué no lo es. Lo anterior lleva a que sea verdadero un cierto lugar común que se repite entre la élite de este país: “lo que no sale en El Mercurio no existe”."
Habría que preguntarle a Cleto que opina sobre estos temas, no?
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